¿Veremos un referéndum sobre la salida del CCG, la Liga Árabe o la Organización para la Cooperación Islámica como el Brexit?
Abdelbari Atuán
Rai al Yaum, 26/06/2016
Los resultados del referéndum británico para la salida del país de la Unión Europea han desencadenado el pánico de la mayoría de las bolsas mundiales, sobre todo de las occidentales, pero al mismo tiempo han abierto el apetito de referéndum similares de algunos árabes sobre si quedarse o abandonar las organizaciones regionales principales, a saber, la Liga Árabe, el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) y la Organización para la Cooperación Islámica (OCI).
La zona árabe desconoce la cultura de los referéndum transparentes y libres, y tan solo ha puesto en marcha algunos modelos políticos cuyos resultados eran conocidos de antemano, como los referéndum que se celebraban en Egipto, Iraq y Siria, para confirmar la permanencia del presidente de la república en la cumbre del poder o para aprobar de vez en cuando constituciones que no cambiaban, que estaban clonadas.
Este fenómeno, el de los referéndum enlatados, ha retrocedido un poco en la última etapa, tras las revueltas espontáneas de la Primavera Árabe en algunos países (…) aunque en los últimos referéndum los resultados finales fueron los previstos y la gente se abstuviera de votar en la mayoría de los casos, y como ejemplo más destacado está el último referéndum de la Constitución egipcia.
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No creemos que lleguemos a ver, al menos en un futuro cercano, un referéndum popular árabe para decidir si permanecer o no en la Liga Árabe, un organismo desintegrado que ha ido perdiendo su importancia y cuya popularidad ha caído en los últimos veinte años debido a que está controlado por el dinero de los países del Golfo, a la pérdida de papel de los países más importantes a nivel político y económico, a la destrucción de Iraq a raíz de la conspiración árabe y de la lucha sectaria, a la crisis siria, a la guerra en Yemen, a la lucha sectaria, y a la pérdida del interés de la gente en esta institución corrupta y sus instituciones (…).
El aislamiento de Gran Bretaña: la inocencia y la culpa del islam
Satea Nureddín
Al Mudun, 24/06/2016
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El referéndum británico es el eco del ascenso de la extrema derecha europea, y de la derecha en general, como resultado de la peor crisis económica vivida desde la segunda guerra mundial. El voto de los británicos contra los tories y los laboristas ha despejado el terreno al partido separatista de la Independencia para que deje de ser la tercera fuerza y se convierta en la segunda, o tal vez la primera fuerza política del Reino Unido. Esta es la historia de todos los países de la UE sin excepción… y también en otras partes del mundo.
Es un voto contra la emigración europea interna in crescendo. Pero también es un voto que ha tomado en el islam y en la identidad islámica de Turquía, candidata a entrar en ese club de ricos, un fuerte impulso, lo que se ha convertido a veces en la principal obsesión europea, pese a que el porcentaje de emigrantes musulmanes no supera el 10% (…) y a que los sirios solo representan un 5% de ese porcentaje y puede que los refugiados no sean más de 200.000 frente a los cientos de miles de refugiados europeos y asiáticos que cruzan las fronteras europeas de forma legal o en el marco del tráfico ilegal.
El islam es inocente del referéndum británico y de la tendencia europea general. Y así lo dice la propia élite europea. Pero ha sido y seguirá siendo un pretexto esencial para movilizar a los pobres de Europa, y no es necesario el apoyo que ofrece el Daesh de vez en cuando para que esos pobres decidan aislarse dentro de las fronteras nacionales, que pueden estrecharse en torno al resto de los británicos o al resto de los europeos para quedarse en los confines de pequeños estados que buscan bonanza económica pero solo encuentran tensión política.
La revolución de la derecha europea y sus posibles repercusiones en el mundo islámico
Ihsán al Faquih
Arabi 21, 26/06/2016
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En cuanto se votó por la salida de la Unión Europea en Gran Bretaña, la extrema derecha de países europeos como Francia pidió un referéndum similar para salir de Europa, apostando por el ascenso del nacionalismo. Parece que estamos ante una revolución de la extrema derecha europea para impedir la supuesta “islamización” de Europa, y que vaticina oscuros escenarios por el efecto que puede tener en el mundo árabo-islámico.
La hegemonía de la derecha en Europa provocará un retroceso de la influencia de personalidades y organismos que apoyan las causas árabes; y las comunidades de musulmanes estarán sometidas a decisiones extremistas que afectarán a la libertad de movimiento dentro de Europa. Los países europeos armonizarán más con la postura de EE. UU. hacia Israel lo que repercutirá irremediablemente en la lucha arabo-israelí.
Esta posibilidad la refuerza el hecho de que los países europeos siempre han tendido a la derecha, porque creen estar en una lucha civilizacional con los musulmanes y además tienen un proyecto colonial (la asociación euro-mediterránea) que converge con el proyecto estadounidense (el gran Oriente Próximo) en el diagnóstico del problema con el mundo arabo-islámico, aunque difieran en la forma de tratarlo.
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Viñeta de Muwafaq Qat para el diario Al Arab
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